San Jorge nació hacia el año 300, en Oriente, siendo su patria Siria

Siguió, como su padre, la carrera militar

Portaestandarte de la fe y defensor de los perseguidos e inocentes

Conmemoracion: 23 de Abril

 

SAN JORGEEste 23 de Abril recordamos al “Melagomártir”, al defensor de la Iglesia, al portaestandarte de la fe y defensor de los perseguidos e inocentes: San Jorge. Además de Aragón y Cataluña lo tienen por patrón otros países como Georgia, Grecia, Inglaterra, Polonia, Portugal, Lituania y Serbia. Su culto se extendió por Oriente y Occidente antes del s. XII.

San Jorge nació hacia el año 300, en Oriente, siendo su patria Siria, según unos, y Capadocia, según otros. Recibió una educación cristiana y una instrucción muy esmerada, en consonancia con su familia, que era rica y poderosa. Siguió, como su padre, la carrera militar; y, por su comportamiento, su ingenio y modales, se ganó el aprecio en el ejército romano, donde sirvió, siendo nombrado capitán de la guardia del palacio del emperador Diocleciano en Nicomedia.

En los comienzos de siglo IV, imperando Diocleciano, se adoptaron medidas para eliminar del ejército imperial de oriente a los numerosos elementos cristianos que en él servían. Muchos soldados tuvieron que renunciar a la profesión de las armas. Rápidamente se extendió la persecución por toda el Asia menor. Lleno de dolor e indignación en vista del proceder injusto y la persecución sangrienta que eran victimas los cristianos, San Jorge resolvió públicamente tomar su defensa.

Para ello distribuyó sus bienes entre los pobres, y despidió a los pocos criados que tenía a su servicio, defendió con valentía la causa de los perseguidos ante el consejo de dignatarios y jefes militares convocado por Diocleciano, y afirmo públicamente que su religión era única y verdadera, y que no se podía rendir culto a los ídolos.

Al ser interrogado, San Jorge declaró que era cristiano, luego de ello, el emperador le habló luego de los suplicios espantosos que su desobediencia a los edictos le acarrearía y por otra parte las dignidades y elevados cargos con que pensaba premiar su apostolado. A esto San Jorge replicó que eran inútiles aquellas promesas y amenazas. Indignado Diocleciano, lo mandó encerrarle en una tenebrosa cárcel.

Aquí se inicia la dolorosa pasión del mártir, los relatos de los hagiógrafos orientales describen los suplicios que en diferentes ocasiones padeció, tales como: el tormento de la rueda guarnecida de cuchillos afilados, el de los garfios de hierro, la flagelación con nervios de buey, el baño en lechada de cal viva…etc. El valeroso soldado lo sufre todo con sobrehumano valor y ve luego como sus heridas quedan curadas milagrosamente. Le dan de beber un licor envenenado, lo toma y no sufre menor daño, según promesa de Cristo en su evangelio. Se dice que su martirio duró 7 años durante los cuales se provocaron conversiones y resurrecciones.

Se dice que en una oportunidad al comparecer San Jorge ante el tribunal de Diocleciano, el emperador quiere sobornarlo con tiernas palabras, le pone por delante su juventud y le promete toda suerte de honores si consiente en sacrificar a los dioses. ” Pero donde están esos dioses?” Pregunta el confesor, ” vamos a verlos”. Y Jorge con otro portentoso milagro obliga a declarar al demonio que mora en el ídolo, que solo hay un dios verdadero, luego hace la señal de la cruz y todas las estatuas caen al suelo echas pedazos, con lo cual se provoca un verdadero motín.

Finalmente el emperador persuadido de que la fe de San Jorge era invencible, pronunció la sentencia final. El Santo fue atado a la cola de un brioso caballo y arrastrado así por las calles de la ciudad.

Después fue bárbaramente decapitado, en las afueras.

Su cuerpo fue trasladado más tarde a Lydda, población de Tierra Santa, conforme a su deseo. Un siglo más tarde la cabeza de San Jorge se transporta a Roma y desde entonces creció notablemente su culto.

Ricas son las leyendas que nos cuentan maravillas y milagros de la recia personalidad de San Jorge. La de San Jorge es un mensaje luminoso y siempre actual. El Santo a caballo mata un dragón y salva a una doncella: “Porque, sin saber cómo, de pronto se presentó un guerrero y en el nombre del Señor Jesús mató el dragón. La ciudad respiró y desde entonces empezó para ellos una nueva vida. La doctrina de Jesús que les enseñó San Jorge les hizo libres.”

JORGE SANTO

Hoy, pidamos a nuestro Señor Jesús y a María Santísima que por la intercesión de San Jorge sepamos encontrar en la doctrina de Jesús aquella verdad que nos hace libres.

Tú diste la vida por amor al Evangelio.
San Jorge, mártir, compañero fiel de Jesús.
Nos gusta recordarte en la luz de la Pascua;
nos gusta recordarte potente en el combate
contra todo dolor y toda esclavitud.

Jesús te ama