¿Cuál es el antídoto? Un niño se propone como una especie de ícono vivo para estos ambiciosos Apóstoles. Primero notamos cómo Jesús se identifica físicamente con el niño, sentándose a su nivel y colocando los brazos sobre él. Es como si dijera que Él mismo es un niño. ¿Por qué es esto? Porque los niños no saben cómo disimular, cómo ser de una manera y actuar de otra. Ellos son lo que son; actúan de acuerdo con su naturaleza más profunda.

¿Por qué esta historia sobre la identificación de Jesús con los niños fue preservada en todos los Evangelios sinópticos? De alguna manera, se acerca al corazón de la vida y el mensaje de Jesús. 

Mauricio, Santo

Mártir, 22 de septiembre

Por: Catholic.net | Fuente: Catholic.net

Martirologio Romano: En Agauno (hoy Saint Maurice d´Agaune), en la región de Valais, en el país de los helvecios, santos mártires Mauricio, Exuperio, Cándido, que siendo soldados, al decir de san Euquerio de Lyon, fueron sacrificados por su fe en Cristo, en tiempo del emperador Maximiano, juntamente con sus compañeros de la misma legión Tebea y el veterano Víctor, ilustrando así a la Iglesia con su gloriosa pasión (c. 302).

Etimología: Mauricio = oscuro, sombrío, de Mauritania. Viene de la lengua latina.

Fecha de canonización: Información no disponible, la antigüedad de los documentos y de las técnicas usadas para archivarlos, la acción del clima, y en muchas ocasiones del mismo ser humano, han impedido que tengamos esta concreta información el día de hoy. Si sabemos que fue canonizado antes de la creación de la Congregación para la causa de los Santos, y que su culto fue aprobado por el Obispo de Roma, el Papa.

Breve Biografía

San Mauricio (llamado también Maurice, Moritz o Mauritius). Era el comandante de la Legión Tebana y murió martirizado a principios del siglo III.

La Legión Tebana, integrada sólo por cristianos procedentes de Egipto, recibió órdenes de partir hacia Galia para auxiliar al emperador Maximiano. Aunque combatieron valientemente, rehusaron obedecer la orden imperial de perseguir a los cristianos, por lo que fueron diezmados. Al negarse por segunda vez, todos los integrantes de la Legión Tebana fueron ejecutados. El lugar en que supuestamente tuvieron lugar estos hechos, conocido como Agaunum, es ahora la sede de la abadía de Saint Maurice, en el cantón suizo de Valais.

Esta es la versión más antigua de la historia del martirio de la Legión Tebana, de acuerdo con la carta que Eucherius, arzobispo de Lyon (c. 434 – 450) dirigió al también obispo Salvius. En otras versiones varía la causa del martirio, y los legionarios son ejecutados por negarse a hacer sacrificios a los dioses romanos.

El mejor cambio es desde Dios

Santo Evangelio según san Marcos 9, 30-37. Domingo XXV del Tiempo Ordinario.

Por: Francisco Posada | Fuente: somosrc.mx

En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.
Amén.

Cristo, Rey nuestro.
¡Venga tu Reino!

Oración preparatoria (para ponerme en presencia de Dios)

Señor, gracias por permitirme estar hoy aquí en tu presencia. Quiero estar atento a escuchar lo que me quieres decir. Concédeme la humildad que necesito para parecerme cada día más a ti.

Evangelio del día (para orientar tu meditación)
Del santo Evangelio según san Marcos 9, 30-37

En aquel tiempo, Jesús y sus discípulos atravesaban Galilea, pero él no quería que nadie lo supiera, porque iba enseñando a sus discípulos. Les decía: “El Hijo del hombre va a ser entregado en manos de los hombres; le darán muerte, y tres días después de muerto, resucitará”.

Pero ellos no entendían aquellas palabras y tenían miedo de pedir explicaciones. Llegaron a Cafarnaúm, y una vez en casa, les preguntó: “¿De qué discutían por el camino?”. Pero ellos se quedaron callados, porque en el camino habían discutido sobre quién de ellos era el más importante. Entonces Jesús se sentó, llamó a los Doce y les dijo: “Si alguno quiere ser el primero, que sea el último de todos y el servidor de todos”. Después, tomando a un niño, lo puso en medio de ellos, lo abrazó y les dijo: “El que reciba en mi nombre a uno de estos niños, a mí me recibe. Y el que me reciba a mí, no me recibe a mí, sino a aquel que me ha enviado”.

Palabra del Señor

Medita lo que Dios te dice en el Evangelio

A los discípulos de Jesús no les entraba en la cabeza el que su Maestro tuviera que pasar por el túnel del sufrimiento; que para ser el primero se tenga que ser el servidor de todos; que en las nuevas categorías del Reino de Cristo el niño ocupe un lugar primordial. No era fácil para ellos dejar la concepción en la que se habían educado desde su infancia. Pero para ser discípulos de Cristo tenían que cambiar. Debían aceptar que el sufrimiento es camino de redención para Jesucristo, y lo sigue siendo para los cristianos de hoy.

La cultura en la que vivimos y la mentalidad de nuestros contemporáneos está hecha al cambio. Se cambia más fácilmente que antes de trabajo, de computadora, de coche, de casa, de país… Se cambian también los modos de pensar y vivir, los valores de comportamiento, y hasta la misma religión.

El cambio está a la orden del día, y quien no cambia, pronto pasa a formar parte de los «retros». Pero ¡claro!, no todo cambio es bueno para el hombre. Ni todo cambio indica progreso. Hay cambios que son una desgracia, como el tener que dejar el país y la familia para buscar trabajo. El cambio al que la liturgia nos invita es el cambio desde Dios. Es decir, aquel cambio que Dios quiere y espera del hombre para que sea más hombre, para que viva mejor y más plenamente su dignidad humana. El cambio que Dios quiere es el de la injusticia a la justicia, del abuso al servicio de los demás, de la infidelidad a la fidelidad, del odio al amor, de la venganza al perdón, de la cultura de muerte a la cultura de la vida, del pecado a la gracia y a la santidad.

«Jesús invita a sus discípulos a hacerse como niños porque “a quien es como ellos pertenece el Reino de Dios”. Queridos hermanos y hermanas, los niños llevan vida, alegría, esperanza, también disgustos, pero la vida es así. Ciertamente llevan también preocupaciones y a veces problemas; pero es mejor una sociedad con estas preocupaciones y estos problemas, que una sociedad triste y gris porque se ha quedado sin niños».

(Homilía de S.S. Francisco, 18 de marzo de 2015).

Diálogo con Cristo

Ésta es la parte más importante de tu oración, disponte a platicar con mucho amor con Aquel que te ama.

Propósito

Proponte uno personal. El que más amor implique en respuesta al Amado… o, si crees que es lo que Dios te pide, vive lo que se te sugiere a continuación.

Poner especial atención a los signos de amor de Dios en este día.

Despedida

¡Cristo, Rey nuestro!
¡Venga tu Reino!

Virgen prudentísima, María, Madre de la Iglesia.
Ruega por nosotros.

En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.
Amén.

San Mauricio, el líder de la famosa Legión Tebana que prefirió la muerte

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Dolors Massot – publicado el 22/09/14

Al mando de una de las legiones de élite del Imperio Romano, fue castigado por el emperador junto con sus soldados porque eran cristianos.

Mauricio era un militar de élite romano que procedía de la ciudad egipcia de Tebas. De aquella provincia romana era la Legión Tebana, de la que era el legatus, legado (el cargo más alto). El nombre de Mauricio sugiere que era de tez oscura, posiblemente moro.

A través de san Euquero, obispo de Lyon (Francia), del siglo V, nos ha llegado una extensa narración del martirio que sufrieron tanto Mauricio como el resto de soldados de la Legión Tebana.

El emperador Maximiano Hercúleo ordenó, en los actuales Alpes suizos, combatir contra los bagaudos, que eran revolucionarios del Bajo Imperio (siglos III y IV d. C). Pero Mauricio, como sabía que estos en la Galia eran mayoritariamente cristianos, se negó a pasarlos a cuchillo.

Una injusta condena

Maximiano entonces ordenó castigar a la legión (que podía ser de entre 3.000 a 6.000 hombres) matando a un buen número de ellos.

Por segunda vez les ordenó atacar y la legión se negó. Así que esta vez el emperador mandó ejecutarlos a todos, incluidos san Mauricio y sus subordinados san Exuperio y san Cándido, a quienes nombra el martirologio.  

Víctor, que era un veterano, llegó en el momento en que acababa de suceder este episodio, y al conocer lo que había ocurrido manifestó que también habría querido morir como los heroicos soldados de la Legión Tebana. Enfurecido, Maximiano dio orden de que también fuera ejecutado.

Algunos historiadores cuestionan si se produjo este castigo diezmando a la legión por su desobediencia (ya que no era una práctica habitual en el siglo III) o bien se llevó a cabo una condena porque los de la Legión Tebana no querían adorar a los dioses paganos.

En cualquier caso, queda corroborado que hubo una gran matanza entre la Legión Tebana en Agaunum en el año 287. El antiguo lugar que ocupaba Agaunum hoy es la Abadía de san Mauricio, en el cantón de Valais (Suiza).

Patronazgo

San Mauricio (Maurice en francés y Moritz en alemán) es patrono de armeros, sastres, tintoreros y soldados de infantería, abogado contra los calambres y la gota. También es patrón de la ciudad de Caracas, del Reino de Borgoña, de Saboya, del Piamonte y de Cerdeña.

Ha sido patrono de los reyes de la dinastía merovingia, lombarda y carolingia, de los emperadores del Sacro Imperio Romano Germánico, de las tropas alpinas, y sigue siéndolo de la Guardia Suiza.

Oración

Dios todopoderoso y eterno, que diste a los santos mártires Mauricio, Exuperio, Víctor, Cándido y otros soldados de la Legión Tebana, la valentía de aceptar la muerte por el nombre de Cristo: concede también tu fuerza a nuestra debilidad para que, a ejemplo de aquellos que no dudaron en morir por ti, nosotros sepamos también ser fuertes, confesando tu nombre con nuestras vidas. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo. Amén.