Texto del Libro – El diario de Santa Faustina

Oh virgen, azucena blanca como la nieve,
Tú vives entera sólo por Jesús,
(96) Y en el puro cáliz de tu corazón
Hay una agradable morada para Dios Mismo.

Oh virgen, nadie logra cantar tu himno,
En tu canción está escondido el amor de Dios,
Los mismos ángeles no comprenden
Lo que las vírgenes cantan a Dios

Reflexión: Pureza

Oh Virgen Azucena, blanca como la nieve, tú vives entera solo por Jesús y en el puro cáliz de tu corazón hay una agradable morada para Dios mismo. Oh Virgen Nadie logra cantar tu himno en tu canción. Está escondido el amor de Dios. Los mismos ángeles no comprenden lo que las vírgenes cantan a Dios. Señor, ¿quién habitará en tu monte santo? El Espíritu Santo contesta. Aquel cuyas manos sean inocentes y puro el corazón. Aquel que anda sin mansilla y obra según justicia. Puro tiene que ser quien quiera acercarse al Dios de toda pureza. Tan solo el que tiene el corazón puro puede gozar del prestigio de ver a Dios. Es menester, ser casto para ser discípulo predilecto de Jesús. ¿Cuál debe ser la pureza de un discípulo? 1. Pureza de cuerpo para guardar y mantener esta bella virtud. Hace falta cubrirse con la modestia de Jesucristo a fin de preservarse de los escándalos del mundo. Guardar los sentidos con la mortificación de Jesús. 2. Pureza de corazón. No se debe tener ningún afecto desordenado que esto sea una especie de idolatría. Deben purificarse los afectos legítimos. El amor al prójimo no puede ni debe ser centro sino que este carácter debe tenerlo únicamente el amor a Dios, cuyo es el ser, la vida y el movimiento. 3. Pureza de espíritu: La imaginación no deberá representarme otra cosa que la hermosura y la bondad de Jesucristo. La memoria deberá servirme para tener siempre presente su ley. La razón es para conducirme a Dios y hacer siempre su voluntad. 4. Pureza al servicio de Jesucristo: La pureza debe ser la virtud regia de mi servicio eucarístico. Todo en eucaristía nos invita a la fuerza. La razón es que Jesucristo entra en ella con mayor o menor intimidad según sea el grado de pureza.

Desearte un lindo día. El Señor de la misericordia te conceda la pureza a tí y tu familia.

Dios te bendiga y te proteja.

Santa Faustina, ruega por nosotros.

Amén.

Dr. Victor Arce