Texto del Libro – El diario de Santa Faustina:

Hoy, por equivocación entré en la habitación aislada vecina, así que hablé un momento con aquella persona.  Al volver a mi habitación, pensé en ella un momento, entonces el Señor Jesús se presentó junto a mí y me dijo: Hija Mía, ¿en qué estás pensando en este momento?  Sin pensar, me estreché a su Corazón, porque comprendí que había pensado demasiado en la criatura.

Reflexión: Los Apegos

Era el día 16 de febrero de 1937, en su diario Santa Faustina nos cuenta: Hoy por equivocación entré en la habitación vecina y me quedé pensando en ella. Los apegos: No pretendas gozar de otra familiaridad que la de Dios y la de sus ángeles y santos. Huye de estar charlando con gente mundana. No descubras tu corazón a cualquiera. Tus asuntos debes tratarlos con personas prudentes y temerosas de Dios. Para seguir a Cristo es necesario tener el alma libre de todo apegamiento: del amor, así mismo, de las preocupaciones excesivas de la salud y del futuro, de las riquezas y bienes materiales. Porque cuando hay mucho apego ya no queda lugar para Dios. Si alguno no renuncia a todo lo que posee no puede ser mi discípulo. El desprendimiento efectivo de lo que somos y poseemos es necesario para seguir a Jesús, para abrir nuestra alma al Señor. Mientras más independices tu corazón del amor desordenado a las criaturas, más gustoso se sentirá Jesús en morar contigo. Los apegos exigen un desprendimiento efectivo y concreto. El fin de un cristiano no es tener cada vez más, sino amar más y más a Jesús.

“Oh Sangre y Agua que brotaste del corazón de Jesús como fuente de Misericordia para nosotros, en ti confío”.

Desearte un lindo día la misericordia te llene de su amor a ti y a tu familia. Dios te bendiga y proteja.

Amén.

Dr. Victor Arce.