Texto del Libro – El diario de Santa Faustina:
Desde que te confié a una particular asistencia de los sacerdotes, quedas dispensada de rendir cuenta de modo detallado a las Superioras de cómo Yo trato contigo. Además de eso, debes ser como una niña frente a las Superioras, pero de lo que cumplo en el fondo de tu alma, habla sinceramente y de todo solamente a los sacerdotes. Y observé que desde el momento en que Dios me dio el director espiritual, no exigía que hablara de todo como antes, a las Superioras, a excepción de lo que se refería a las cosas exteriores. Por el resto, solamente el director espiritual conoce mi alma. Tener el director espiritual es una gracia excepcional de Dios. Oh, qué pocas son las almas que tienen esta gracia. Entre las más grandes dificultades, el alma vive continuamente en paz; todos los días, después de la Santa Comunión, agradezco al Señor Jesús por esta gracia y cada día le pido al Espíritu Santo la luz para él. En verdad, yo misma sentí en el alma qué gran poder tienen las palabras del director espiritual. Que la misericordia de Dios sea adorada por esta gracia.
Reflexión: La Superiora
Hoy Santa Faustina nos habla en su Diario del Trato con la superiora y el Director Espiritual cuando el Señor le dice: Debes ser como una niña frente a la Superiora. Decía Casiano de aquellos Padres antiguos, que los nuevos que entraban a servir al Señor en una congregación que todas sus tentaciones y todo lo que pasase por su alma lo habían de descubrir a sus superiores, las hermanas se dan totalmente a conocer a su superiora. ¿Por qué es importante este conocimiento? Primera razón, para que la superiora pueda mejor gobernar y corregir a sus hermanas, dice Proverbios: El que esconde y encubre sus faltas no puede ser corregido. 2. Al conocer sus cosas interiores y exteriores, sus inclinaciones y tentaciones, talentos y habilidades buenas y malas, de esa manera la superiora repartirá a cada uno según sus fuerzas y talento. 3. Es la más importante, para que la Superiora pueda ordenar y proveer lo que nos conviene a la Congregación. A veces dice San Doroteo de la congregación, por esto cayó aquel, por esto salió la otra, la causa es haberse cerrado al inicio y no haber querido dar cuenta de las cosas que pasaban por su alma. Qué gran descanso y consuelo es hablar con claridad con su superiora y padre espiritual y descubrir y abrir su corazón. Porque la superiora es Nuestra Madre y Nuestra Maestra y lo guardará todo en secreto. “Por su dolorosa pasión, ten Misericordia de nosotros y del mundo entero”
Desearte un lindo día a ti y a tu familia. Dios te bendiga y proteja.
Amén.
Dr. Victor Arce.