Texto del Libro – El diario de Santa Faustina
Durante la Hora Santa que trataba de hacer, vi a Jesús doliente que me dijo estas palabras: Hija Mía, no prestes tanta atención al recipiente de la gracia, sino a la gracia misma que te doy, porque el recipiente no siempre te gusta y entonces también las gracias se hacen defectuosas. Quiero preservarte de ello y deseo que nunca prestes atención al recipiente en que te envío Mi gracia, sino que toda la atención de tu alma (5) se centre en corresponder con máxima fidelidad a Mi gracia.
Reflexión: Fidelidad a mi gracia
Hija mía, no prestes tanta atención al recipiente de la gracia, sino que, toda la atención de tu alma se centre en corresponder con máxima fidelidad a mi gracia.
“Al que tiene se le dará; y al que no tiene, incluso lo que parece tener se le quitará”. Comenta San Juan Crisóstomo: “Al que es diligente y fervoroso, se le dará toda la ayuda que depende de Dios, pero al que no tiene amor ni fervor, ni hace lo que de él depende, tampoco se le dará lo de Dios”. Porque aún lo que parece tener, -dice el Señor- lo perderá, no porque Dios se lo quite , sino porque se incapacita para nuevas gracias; que importante es la fidelidad a la gracia.
Según la capacidad que el vaso de la fe lleva la fuente así es lo que recibe. Jesús es una fuente inagotable de ayuda de amor. El Señor nos ofrece constantemente su gracia para ayudarnos a ser fieles cumpliendo el pequeño deber de cada momento.
Recibir la gracia con docilidad es empeñarnos en llevar a cabo aquello que el Espíritu Santo nos sugiere en la intimidad de nuestro corazón y cuanto mayor es la fidelidad a esas gracias, mejor nos disponemos para recibir otras.
La docilidad a las inspiraciones del Espíritu Santo, es necesaria para conservar la vida de la gracia y para tener frutos sobrenaturales . La resistencia a la gracia hace que la vida interior se empobrece y muere. La fidelidad a la gracia se resume en tres puntos: 1. Ser dóciles a las inspiraciones del Espíritu Santo, porque nos da luz y fuerza para realizar todo lo que Dios espera. 2. Vida de Oración que nos conduce al Espíritu Santo. 3. Unión con la cruz aceptando las mortificaciones que nos unen a la cruz.
Desearte un lindo día. El Señor de la misericordia te conceda la fidelidad a la gracia a tí y tu familia.
Dios te bendiga y te proteja.
Santa Faustina, ruega por nosotros.
Amén.
Dr. Victor Arce