Texto del Libro – El diario de Santa Faustina:

Al sumergirme en la oración, fui trasladada en espíritu a la capilla y vi al Señor Jesús expuesto en la custodia; en lugar de la custodia veía el rostro glorioso del Señor y el Señor me dijo:  Lo que tú ves [en] realidad, estas almas lo ven a través de la fe.  Oh, qué agradable es para Mi su gran fe.  Ves que aparentemente no hay en Mi ninguna traza de vida, no obstante, en realidad ella existe en toda su plenitud y además encerrada en cada Hostia.  Pero para que Yo pueda obrar en un alma, el alma debe tener fe.  Oh, cuánto Me agrada la fe viva.

Tuvieron esta adoración la Madre Superiora y también otras hermanas.  Pero conocí que la oración de la Madre Superiora sacudió el cielo.  Me alegro de que haya almas tan agradables a Dios.

Reflexión: Fe Eucarística

Vi al Señor Jesús expuesto en la Custodia. El Señor me dijo: “Lo que tú ves en realidad, estas almas lo ven a través de la fe. Pero para que yo pueda obrar en un alma, debe tener fe”. Oh cuánto me agrada la fe viva. La virtud que debe sobresalir en la vida de una sierva del Santísimo Sacramento es la fe eucarística. Esta fe es una gracia, que hay que pedirla con perseverancia.

Fe eucarística, consiste en creer que Jesucristo está verdadera, real y sustancialmente presente bajo las especies sacramentales. Esta fe es y obra en nosotros la vida de Jesucristo oculto bajo las santas especies. El alma de fe ve a Jesús con una mirada interior de la gracia, ve su humanidad y divinidad santísima, todo su amor, toda su bondad. La visión de la Eucaristía es una visión de tierno y respetuoso amor.

La fe eucarística es la ciencia y la visión espiritual de Jesucristo en el Santísimo Sacramento. El alma debe vivir de la virtud de la fe eucarística, con el debido respeto, en la piedad, con la devoción a Jesús Eucaristía.

Respeto eucarístico: La fe me muestra a Jesús resucitado, glorioso, sentado como Dios en su trono, con esta visión celestial, el alma se siente penetrada de un respetuoso silencio, debe postrarse y humillarse a la vista del Hijo de Dios. Piedad eucarística: La piedad de un alma eucarística debe ser inspirada y alimentada por la Eucaristía. Jesús Sacramentado debe ser principio y regla de todas las virtudes. Devoción eucarística: debe orientar la generosidad del alma a Jesús sacramentado. La fe en la Eucaristía es un tesoro, buscarla con sumisión, defenderla con sacrificios.

Desearte un lindo día. El Señor de la Misericordia te conceda la fe eucarística a ti y a tu familia.

Dios te bendiga y te proteja.

Sta. Faustina. Ruega por nosotros.

Amén.

Dr. Víctor Arce.