Texto del Libro – El diario de Santa Faustina:

Con gran celo me he preparado para celebrar la fiesta de la Inmaculada concepción de la Madre de Dios.  He prestado más atención al recogimiento del espíritu y meditando sobre este privilegio exclusivo de Ella; así que todo mi corazón se sumergía en Ella, agradeciendo a Dios por haber concedido a María este gran privilegio.

Me he preparado no solamente con la novena común que hace toda la Comunidad, sino que me he propuesto además saludarla mil veces al día, rezando cada día en su honor mil Avemarías durante nueve días.

Reflexión: El recogimiento del Espíritu

Con gran celo me he preparado para celebrar la fiesta de la Inmaculada Concepción de la Madre de Dios. He prestado más atención al recogimiento del Espíritu y meditando sobre este privilegio es exclusivo de ella.

“Enséñame Dios mío el camino de la Santidad”. La ley de la Santidad en el recogimiento. Cuando Dios llama a un alma para hacerla salir del pecado procura que se recoja en su conciencia; también se vale del recogimiento para introducirnos en una virtud más elevada. El recogimiento es el medio que emplea para unirse con el alma en la vida del amor. Cuando Dios quiere otorgar a un alma una gracia muy grande y conducirle a una elevada virtud le concede la gracia de un mayor recogimiento.

El recogimiento es una gracia que nos aproxima más a Dios, nos alcanza más luz para comprender las verdades divinas, se siente una paz y una fuerza que nos une a Dios. ¿Cómo adquirir y conservar el santo recogimiento? Tenemos que cerrar las puertas y las ventanas de nuestra alma. Es ponerse por entero a la disposición de Dios, tener el espíritu de recogimiento es vivir recogido con gusto, se requiere de un centro divino y este centro es Jesucristo, la Eucaristía. Jesús presente en nosotros por su Espíritu.

El acto de recogimiento es una simple aplicación de todas las facultades y sentidos y un solo objeto.

El secreto para llegar al verdadero recogimiento es el recogimiento de corazón, la capacidad del corazón para amar es inmensa, el corazón siempre puede amar más. Debemos darle todo nuestro corazón. Recogerse es concentrarse de fuera hacia adentro, es vivir cerca de Dios, con Dios.

Desearte un lindo día. El Señor de la Misericordia te conceda el recogimiento del Espíritu a ti y a tu familia.

Dios te bendiga y te proteja.

Sta. Faustina. Ruega por nosotros.

Amén.

Dr. Víctor Arce.