Texto del Libro – El diario de Santa Faustina
+ Hoy [401] los dolores han aumentado, además he sentido las heridas en las manos, los pies y al costado; los he soportado con paciencia. He sentido la rabia del enemigo de las almas, pero no me ha tocado.
Reflexión: La paciencia
Hoy los dolores han aumentado. Además, he sentido las heridas en las manos, los pies y al costado. Los he soportado con paciencia. El lirio perfumado de la paciencia de San José. Lirio que irradiará tu corazón de luz. Lirio que te dará quietud, sosiego, armonía. Lirio que irá destruyendo todo ímpetu, todo desespero de tal modo que tú ser quede impregnado del suave aroma del Señor, aroma que te de su paz, aroma que te llevará en ascenso hacia el cielo, aroma que empapará tu corazón con los sus susurros de brisa suave, aroma que moldeará tu temperamento fuerte, irascible, haciéndote manso, aroma que te dará la gracia de saber esperar, de no impacientarte por nada ni por nadie; aroma que te oxigenará te tu sistema nervioso dándote tenacidad, aguante para que soportes todo, toleres todo, ofrezcas todo. Ven acércate a mí, huele su exquisito aroma, es Dios quien te cohabita, es Dios que te posee, es Dios quien te ha propiciado este encuentro es Dios quien te ha susurrado en tu corazón y por eso estás aquí, es Dios quien te atrajo como imán hacia mí. Es Dios quien te ha abierto el entendimiento, para que recibas otras gracias en este miércoles josefino. Una nueva virtud, la virtud de la paciencia que aquietará tu espíritu, desahogará tu alma y descansará tu corazón. Virtud que te refinará como plata, virtud que te encaminará y equipará para que aceptes con amor y resignación todo lo que Dios se digne en enviarte, abre tu corazón, quiero plantar el lirio perfumado de la paciencia que te hará semejante a Jesús. Ve a tu casa, a tu hogar, a tu lugar de trabajo y haz que se note sin pronunciar palabra, que eres dueño poseedor del lirio perfumado de la paciencia.
Desearte un lindo día. El Señor de la misericordia te conceda la paciencia, a tí y tu familia.
Dios te bendiga y te proteja.
Santa Faustina, ruega por nosotros.
Amén.
Dr. Victor Arce