Texto del Libro – El diario de Santa Faustina

No obstante, después de esa observación he tomado la decisión de sufrir más escondidamente y no pedir ayuda que de todas formas es inútil, ya que vomito los remedios que tomo.  Un par de veces conseguí superar los ataques de los cuales sabe sólo Jesús.  Estos dolores son tan violentos y fuertes que hasta quedo inconsciente.  Tras su ataque, cuando me desmayo y me cubro de sudor frió, entonces empiezan a ceder poco a poco.  A veces duran (27) hasta tres horas o más.  Oh Jesús mío, que se haga Tu santa voluntad, acepto todo de Tus manos.  Si acepto los éxtasis y los arrebatos de amor hasta olvidarme de lo que sucede alrededor de mi, es también justo que acepte con amor los sufrimientos que me quitan la lucidez de la mente.

Reflexión: Dolor II

10 – III- 1938. No obstante, después de esa observación, he tomado la decisión de sufrir más escondidamente y no pedir ayuda, que de todas formas es inútil, ya que vomito los remedios que tomo. Un par de veces conseguí superar los ataques de las cuales solo sabe Jesús. Estos dolores son tan violentos y fuertes que quedo inconsciente tras su ataque, cuando me desmayo y me cubro de sudor frío. Entonces empiezan a ceder poco a poco, a veces duran hasta tres horas o más. Oh Jesús mío, que se haga tu santa voluntad, acepto todo de tus manos, acepto los éxtasis y los arrebatos de amor, hasta olvidarme de lo que sucede alrededor de mí. Es también justo que acepte con amor los sufrimientos que me quitan la lucidez de la mente. Las bienaventuranzas del dolor. 1. El dolor lleva al conocimiento de sí mismo. Solo quien ha sufrido mucho puede decir que se conoce perfectamente y puede llevar la salvación a otros. 2. El dolor medirá al hombre y es la medida del amor, porque el amor y el dolor son un gran misterio, que es el misterio de Dios. 3. El dolor afina y eleva el espíritu. El sufrimiento es el oxígeno del alma, es la gimnasia del espíritu. 4. El dolor capacita para comprender a los demás: los que viven a nuestro alrededor. 5. El dolor purifica y expía nuestros errores y pecados: el orgullo de la concupiscencia y el egoísmo. 6. El dolor es mensajero y aliado de Dios. Es una visita misteriosa y amorosa del Señor para un trato íntimo y personal. 7. El dolor es un medio eficaz de redención, unirse con amor al sacrificio redentor de Cristo. 8. El dolor es fuente de alegría y de paz. Santa Gema, la alegría verdadera está en descubrir a Cristo en participar de sus dolores, en esconderse con él. La alegría y la paz caminan juntas, aumentan las disposiciones interiores de tu espíritu.

Desearte un lindo día. El Señor de la misericordia te libre del dolor, a tí y tu familia.

Dios te bendiga y te proteja.

Santa Faustina, ruega por nosotros.

Amén.

Dr. Victor Arce