«En el Jardín Vasco de Gama, jóvenes de diferentes países se confiesan con el Papa Francisco durante la Jornada Mundial de la Juventud en Lisboa.»

Durante la Jornada Mundial de la Juventud en Lisboa, el Papa Francisco tuvo encuentros sinceros y emotivos con varios jóvenes peregrinos en el Jardín Vasco de Gama. Francisco, de 21 años, de España, Yesvi, de 33 años, de Guatemala, y Samuel, de 19 años, de Italia, compartieron sus vidas y pecados con el Pontífice, quien se mostró cercano y humilde.

En el Jardín Vasco de Gama, con el coro entonando «Esta es la juventud del Papa…», el Papa Francisco llegó a las 9:08 de la mañana, el tercer día de su viaje a Portugal para la Jornada Mundial de la Juventud. El lugar se ha convertido en un espacio significativo, ya que alberga 150 confesionarios construidos por jóvenes reclusos de la cárcel de Pasos de Ferreira, hechos de materiales reciclados y accesibles para personas con discapacidad.

Francisco, Yesvi y Samuel fueron los elegidos para confesarse con el Papa. Samuel, de 19 años y de Belluno, Italia, expresó su agradecimiento por la experiencia, describiendo al Papa como una persona sencilla, humilde y buena, y afirmó haber sentido el perdón durante la confesión.

El cordobés Francisco Valverde, de 21 años, tuvo una emotiva experiencia en el «confesódromo» de la JMJ, y comentó que, a pesar de ser el Papa, durante la confesión, Francisco se mostró cercano como un cura de parroquia. Francisco también destacó que el Papa le brindó consejos y se mostró tranquilo y sin juicios.

Los jóvenes peregrinos compartieron sus emociones y vivencias con el Papa Francisco, quien demostró su cercanía y comprensión, creando momentos íntimos y conmovedores durante la Jornada Mundial de la Juventud en Lisboa.