Texto del Libro – El diario de Santa Faustina

En ese momento vi a Jesús que me dijo:  Estoy contento de lo que haces y sigue tranquila si haces siempre todo lo que está en tu poder para toda esta obra de la misericordia.  Ten la máxima sinceridad con el confesor.  Satanás no sacó ningún provecho con haberte tentado, porque no entraste en conversación con él.  Continua así.  Hoy Me has rendido una gran gloria luchando con tanta fidelidad.  (106) Que tu corazón se consolide y se afirme en que Yo siempre estoy contigo aunque en el momento de la lucha no Me sientas.

Reflexión: Seguir a Cristo

En ese momento vi a Jesús que me dijo: Estoy contento de lo que haces y sigue tranquila si haces siempre todo lo que está en tu poder. Hoy me has rendido una gran gloria luchando con tanta fidelidad.

El Señor se volvió a sus apóstoles que lo habían seguido día tras día, y les preguntó: ¿También vosotros queréis marcharos? Pedro: ¿Señor a quien iremos? Tú tienes palabras de vida eterna. ¿Qué va a ser de ellos sin Jesús? La vida sin Cristo entonces y ahora no tiene sentido, también nosotros hemos dicho sí para siempre a Jesús, decir sí al Señor significa también decir no a otros caminos. El camino a seguir es Jesús.

Una de las virtudes necesarias para seguir a Jesús es la obediencia por Él y solo por Él, una vez le dijo Jesús a Santa Teresa: Hija, la obediencia da fuerza. Cuando te empeñas en andar solo, haciendo tu propia voluntad guiado por tu propio juicio, el fruto se llama infecundidad. El que quiera seguir los pasos del maestro no puede limitar su obediencia. La obediencia nos lleva a querer identificar en toda nuestra voluntad, con la voluntad de Dios, debe ser una obediencia delicada y alegre.

Si somos fieles, un día nos hará contemplar el Señor la trascendencia de seguirlo con obras; cumpliendo los mandamientos de Dios y sus enseñanzas.

Dios pasa por la vida de cada persona, en cualquier edad en la que se reciba la llamada, el Señor da una juventud interior que lo renueva todo, la llena de ilusiones a estrenar y de afán apostólico. ¿Cuál es la mejor edad para entregarse a Dios? Aquella en la que el Señor llama.

Desearte un lindo día. El Señor de la misericordia te conceda seguir a Cristo, a ti y a tu familia.

Dios te bendiga y te proteja.

Santa Faustina, ruega por nosotros.

Amén.

Dr. Victor Arce