Texto del Libro – El diario de Santa Faustina:
¿Por qué estás triste hoy, Jesús? Dime ¿quién ha causado Tu tristeza? Y Jesús me contestó: Las almas elegidas que no poseen Mi espíritu, que viven según la letra, esta letra la han puesto por encima de Mi espíritu, por encima del espíritu del amor. He basado toda Mi ley sobre el amor, sin embargo, no veo este amor ni siquiera en los conventos, por eso la tristeza Me llena el Corazón.
Reflexión: El Espíritu del Amor
¿Por qué estás triste hoy, Jesús? Dime: ¿Quién ha causado tu tristeza? Jesús me contestó: Las almas elegidas que no poseen mi espíritu, que viven según la letra, no veo este amor ni siquiera en los conventos por eso la tristeza me llena el corazón.
La fe nos enseña que el Espíritu Santo, la tercera persona de la Santísima Trinidad procede del Padre y del Hijo por una sublime espiración de amor en virtud de una corriente mutua e inefable entre ambos. El Espíritu Santo es el Don del Amor.
- El fruto del Espíritu es la vida de Jesús en nosotros en eso consiste la verdadera santidad.
- ¿Qué es el amor? Es el don, por eso, en la Santísima Trinidad, El Espíritu Santo es el don.
El amor no necesita ninguna otra causa ni fruto porque amo, amor para amar (San Bernardo). La Eucaristía es por excelencia el sacramento del amor, en ella recibimos al autor de todo don, a Dios mismo en ella está el Espíritu del amor. La medida del amor dice San Bernardo, es amor sin medida.
Un alma de oración crece siempre en amor por lo mismo que comprende lo que es Dios.
El amor es el punto de partida de la verdadera conversión. La conversión causada por el amor es generosa y constante. Cuál es el amor, tal es la vida. Si Jesús es mi amor soberano, mi amor final debe ser la suprema ley de mi vida, ¡Oh venturosa el alma que vive de amor divino pues vive de la misma vida de Dios! ¡Dios es todo su amor, ¿Qué desea Jesús de mí? Que le siga en los diversos estados de su amor, que los honre en mi vida, que vuelva a hacer vivir en mí a Jesús.
Desearte un lindo día. El Señor de la Misericordia te conceda el espíritu del amor, a ti y a tu familia.
Dios te bendiga y te proteja.
Sta. Faustina. Ruega por nosotros.
Amén.
Dr. Víctor Arce.
