Texto del Libro – El diario de Santa Faustina:
Oh Cristo, dame las almas. Envía sobre mi todo lo que quieras, pero a cambio, dame las almas. Deseo la salvación de las almas, deseo que las almas conozcan Tu misericordia. No tengo nada para mí, porque he distribuido todo entre las almas, así que en el día de juicio me presentaré delante de Ti sin nada, porque he distribuido todo entre las almas y por eso no tendrás de qué juzgarme y ese día nos encontraremos: el amor con la misericordia…
Reflexión: Obras
Deseo la salvación de las almas, deseo que las almas conozcan tu misericordia. No tengo nada para mí porque he distribuido todo entre las almas, así que en el día del juicio me presentaré delante de ti sin nada. “Y todo cuanto hagas de palabra o de obra, hazlo en nombre del Señor, dando gracias a Dios Padre por ello”. Pues bien; si quieres dar tu personalidad a Ntro. Señor, debes imitar por la gracia lo que Él hizo: entregarte por completo por amor. Y renunciar a tus derechos, según la medida de la gracia que recibes, sin tomar en cuenta tus miras o tus intereses, rogando a Él que tome su puesto en tu alma. Y por medio de su gracia, el alma, el cuerpo y las facultades de tu persona se esforzarán por imitar esa sumisión y dependencia de Jesús hombre, ante la persona del verbo, que habitaba en Él. Es un continuar y reproducir a Jesús en nosotros que constituye el mejor camino de santificación. Siguiendo las palabras: “Él sea quien viva en mí”. Todas las virtudes y deberes de NUESTRO ESTADO las practicarías conforme a este espíritu de entrega.
Cuando tengamos que cumplir un deber costoso, primero debemos decir: Dios mío te amo más que a mí mismo y por eso hago este acto de amor, de abnegación y paciencia. Quien está unido a Cristo, convierte sus obras en oración y por ello es muy importante el ofrecimiento de obras.
“Mis elegidos no trabajarán nunca en vano, pues ni la más pequeña obra hecha para Dios quedará sin su fruto”. Cada uno recibirá el pago debido a las buenas o malas acciones (S. Pablo).
Alégrate, pues la recompensa es grande en aquel día.
Desearte un lindo día. El Señor de la Misericordia te conceda obrar rectamente a ti y a tu familia.
Dios te bendiga y te proteja.
Sta. Faustina. Ruega por nosotros.
Amén.
Dr. Víctor Arce.