Texto del Libro – El Diario de Santa Faustina
Cuando he vuelto en mí, mi corazón ha sido atraído extrañamente a las virtudes y me ejercito en ellas fielmente, están como esculpidas en mi corazón. Ese ha sido un gran día para mí, ese día he estado como en una contemplación continua en la que el solo recordar esta gracia me introducía en una contemplación nueva y durante el día entero he permanecido dando gracias sin terminar nunca porque el recuerdo de esta gracia empujaba mi alma a sumergirse nuevamente en Dios….
Reflexión: Las virtudes
Cuando he vuelto en mí, mi corazón ha sido atraído extrañamente a las virtudes y me ejercito en ellas fielmente, están esculpidas en mi corazón.
- El conocimiento se obtiene por medio de la gracia especialmente a través de los sacramentos y con el ejercicio de las virtudes. El obstáculo es el pecado el cual es en definitiva una disminución del hombre mismo, que le impide alcanzar la propia plenitud.
El hombre espiritual se desarrolla por la acción del Espíritu Santo, mediante el ejercicio de las virtudes y alcanza su plenitud bajo la influencia de los dones del Espíritu Santo cuya misión es perfeccionar, la vida sobrenatural apoyada por las virtudes teologales. Esos dones se encuentran en toda alma en gracia y la madurez humana no es cosa de un momento es tarea de cada día.
Hemos de poner empeño en ejercitar repetidamente las virtudes. Con el ejercicio de las virtudes nos forjaremos un verdadero carácter instrumento dócil a la acción del Espíritu Santo. “Jesús crecía” y Él ha querido que nuestro crecimiento sobrenatural vaya acompañado de una madurez también humana. Las virtudes naturales son cimiento de las sobrenaturales. Cuando un alma se esfuerza por cultivar las virtudes humanas su corazón está muy cerca de Cristo. Las virtudes teologales: la fe, la esperanza, la caridad y todas las otras que trae consigo la gracia de Dios, te impulsa a no descuidar las virtudes humanas. La verdadera virtud es aquella que cree no tener nada. La virtud se adquiere por el amor y la estima que nos inspira Jesús.
Desearte un lindo día. El Señor de la Misericordia te colme de virtudes a ti y tu familia.
Dios te bendiga y proteja.
Sta. Faustina: Ruega por nosotros. Amén.