Texto del Libro – El diario de Santa Faustina:

Oh dulcísimo Maestro mío, oh buen Jesús, Te doy mi corazón y Tú modélalo, fórmalo según Tu agrado. Oh Amor inconcebible, abro el cáliz de mi corazón ante Ti, como un capullo de rosa se abre al frescor del rocío; el perfume de la flor de mi corazón es conocido sólo por Ti. Oh Esposo mío, que la fragancia de mi sacrificio Te sea agradable, oh Dios inmortal, mi eterna delicia, Tú eres mi cielo ya aquí en la tierra, que cada latido de mi corazón sea un nuevo himno de adoración a Ti, oh Santísima Trinidad.  Su tuviera tantos corazones cuantas gotas de agua hay en el océano, cuantos granos de arena en toda la tierra, Te los ofrecería todos, oh Amor mío, Tesoro de mi corazón.  Con cuántos me encuentre en la vida, deseo atraerlos todos a amarte, oh Jesús mío, mi Belleza, mi Sosiego, mi único Maestro, Juez, Salvador y Esposo a la vez; sé que un título atenúa el otro, he puesto todo en Tu misericordia.

Reflexión: Modela mi corazón

“Oh buen Jesús. Te doy mi corazón y tú modélalo fórmalo según tu agrado”. Dichosos nosotros los que habéis comprendido que Dios es el todo y que solo Dios merece el homenaje soberano de nuestro corazón. ¿Cómo conocemos que realmente lo amamos? La mayor prueba de nuestro amor a Dios es el amor de abnegación y de sacrificio. El amor prefiere el sufrimiento al deleite, el calvario al Tabor. ¿Qué debemos hacer para ser enteramente del Señor y dejar que modele nuestro corazón? La respuesta es combatir por amor para con Él y este combate se libera en el corazón que fácilmente toma cariño a lo que se deja tocar. Es peligrosísimo conversar con ángeles humanos, ellos pueden tener piedad, bondad, que se  pega al corazón y engendra simpatía. De esto se vale el demonio para condiciones del alma a los sentidos y de las cosas divinas a los humanos. No tenemos prudencia, no nos damos cuenta del peligro, vamos tras esos ángeles en busca de sus palabras y consejos, nos agrada recibir pruebas de agradecimiento por todo el bien que hemos hecho y en esto está el peligro. Dios os pide el corazón y lo quiere de un modo absoluto. El corazón es el órgano que se sirve el alma para manifestar los afectos del amor. Dios os pide el corazón y lo quiere de un modo absoluto. Si se lo negáis, lo negáis todo y ya no puede haber unión entre vosotros y Dios.

Desearte un lindo día, no te olvides de rezar la coronilla por un alma que está en agonía. El Señor de la Misericordia te conceda consolar su corazón a ti y a tu familia.

Santa Faustina: ruega por nosotros.

Dios te bendiga y proteja.

Amén.

Dr. Victor Arce.