Texto del Libro – El diario de Santa Faustina:
Esta mañana, después de haber hecho mis ejercicios espirituales, me puse en seguida a hacer labor de gancho. Sentía el silencio en mi corazón y que Jesús descansaba en él. Este profundo y dulce conocimiento de la presencia de Dios me impulsó a decir al Señor: Oh Santísima Trinidad que vives en mi corazón, Te ruego, da la gracia de la conversión a tantas almas cuantos puntos haré hoy con este gancho. De pronto oí en el alma estas palabras: Hija Mía, tus peticiones son demasiado grandes. Jesús, si para Ti es más fácil dar mucho que poco. Es verdad, Me es más fácil dar mucho al alma que poco, pero cada conversión de un alma pecadora exige sacrificio.
Reflexión: La Conversión
Santa Faustina nos recuerda la importancia de la conversión de las almas. Jesús le dice: Pero cada conversión de un alma pecadora exige sacrificio. ¿Qué es la conversión? Significa ir por un camino equivocado y volver al buen camino, tener una conducta indebida y empezar a portarse bien significa haberse alejado de Dios por las malas obras, acercarse por medio de la oración, el arrepentimiento y la buena conducta. La verdadera conversión se manifiesta en la conducta de cada persona. El Señor le pide a Santa Faustina cuando reces esta oración con corazón contrito y con fe por algún pecador le concederé la gracia de la conversión. Esta oración es la siguiente: “Oh, Sangre y Agua que brotaste del corazón de Jesús, como fuente de Misericordia para nosotros, en ti confío”. ¿Por qué es tan importante la conversión? Porque Jesús empezó a predicar diciendo conviértanse que está cerca el Reino de los Cielos. ¿De qué actos se compone la conversión? 1. Examen de conciencia: recordar los pecados cometidos, 2. Arrepentimiento de nuestros pecados: es el dolor de haber ofendido a Dios. 3. El propósito de enmienda: es la firme resolución de no volver a pecar. 4. Confesarse es reconocer los pecados, 5. Ofrecer alguna penitencia por los pecados cometidos.
“Donde abunda el pecado sobreabundó la gracia”. ”Por su Dolorosa Pasión, ten Misericordia de nosotros y del mundo entero”.
Desearte un lindo día, su Misericordia te llene de su amor a ti y a tu familia. Dios te bendiga y proteja.
Amén.
Dr. Victor Arce.