Texto del Libro – El diario de Santa Faustina:
Antes de anochecer oí en la radio cantos y precisamente Salmos cantados por sacerdotes. Rompí a llorar y todo el dolor se renovó en mi alma y lloraba sin encontrar consuelo a mi dolor. De repente oí en el alma una voz: No llores, no sufro más. Y por la fidelidad con la cual Me has acompañado en la Pasión y la muerte, tu muerte será solemne y Yo te haré compañía en esa última hora. Amada perla de Mi Corazón, veo tu amor tan puro, más que el de los ángeles; más, porque tú luchas. Por ti bendigo al mundo. Veo tus esfuerzos por Mí y encantan Mi Corazón.
Después de estas palabras no lloré más, sino que agradecí al Padre celestial por habernos enviado a Su Hijo y por la obra de Redención del género humano.
Reflexión: Fidelidad a Dios
Por la fidelidad con la cual me has acompañado en la Pasión y la Muerte. Nuestro Señor es el Dios de la lealtad rico en amor y fidelidad, fiel en todas sus palabras y su fidelidad permanece para siempre. El maestro habla muchas veces de esta virtud a lo largo del Evangelio. La fidelidad es la correspondencia amorosa a ese amor de Dios. Sin amor pronto aparecen las grietas y las fisuras a todo compromiso. Es fiel quién es leal a su palabra: es leal el que cumple sus compromisos con Dios y con los hombres. Fieles a Cristo: esta es la mayor alabanza que nos puedan hacer; que Jesucristo pueda contar con nosotros sin limitaciones de circunstancias o de futuro, decirle al Señor: ¡Señor puedes contar conmigo! Fidelidad a Dios: Es ser fiel en la vida de oración, en la Eucaristía: Jesús nos llama a unirnos con Él. Es ser fiel en el apostolado, el que pone la mano en el arado y voltea atrás, no es digno de mí. Fidelidad es ser fiel a su palabra y enseñanzas. Es ser fiel a su amor y su llamado “Sígueme”.
Se es fiel si quiero ser discípulo llevando mi cruz de cada día y negando a mí mismo. La fidelidad es una virtud esencial, sin ella es imposible la convivencia y va unida con la perseverancia. Esta virtud requiere de valentía, de fortaleza: sin ella no se puede ser fiel a Dios.
Santa Faustina: ruega por nosotros.
Desearte un lindo día. El Señor de la Misericordia te conceda fidelidad a Dios a ti y a tu familia.
Dios te bendiga y proteja.
Amén.
Dr. Victor Arce.
